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Paralelamente se constituye en un movimiento contra la “Ley Bonilla”
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Olga Sánchez Cordero le puso el último clavo al ataúd de la 4T: Martínez Veloz
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Jaime Bonilla es un gobernador espurio
José
Ángel Inzunza Mendoza
Tijuana,
3 de noviembre de 2019.- El pasado viernes 1 de noviembre del año que
está por fenecer, líderes sociales y militantes del PRD iniciaron un movimiento
nacional denominado Diálogos para la Construcción de la 4 República (4R),
encabezado por el ex candidato a gobernador del PRD, Jaime Martínez Veloz.
Previo al evento, y en
la misma exposición pública de ideas sobre el movimiento, el ya nombrado como
Comisionado de Asuntos Fronterizos del PRD Nacional, aclaró que no se trata literalmente
de crear otro país, sino de lograr una Cuarta Transformación real y efectiva,
en auténtico acompañamiento con el pueblo, que la 4T no cumple.
La 4T es un movimiento
fallido, o, mejor dicho, distorsionado por las ambiciones de poder que ya están
demostrando, con o sin el consentimiento de López Obrador; observa Martínez
Veloz.
Desgraciadamente, prosiguió,
las declaraciones de la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, hacen
ver que el Presidente Andrés Manuel está “nadando de muertito”, pues, mientras por
un lado dicen ser respetuosos de la Ley y de la Constitución, en la toma de
posesión de Jaime Bonilla, le “avalan” 5 años de mandato.
“Olga Sánchez Cordero
vino a ponerle el último clavo al ataúd de la 4T, de la supuesta Cuarta
Transformación; quieren de paso matar y enterrar la democracia, al declarar
claramente que para ellos es legal la ampliación de mandato por un acto
anticonstitucional perpetrado por una banda de pillos de la XXII Legislatura”,
lamentó.
“Con la complicidad
ahora de la pandilla de Morena en el Congreso, Jaime Bonilla recibió
ilegalmente un bando solemne por cinco años, que viola el precepto
constitucional de nuestro estado, que indica, en su Artículo 27 Fracción VII,
que el bando solemne se entrega conforme a la declaración del Instituto Estatal
Electoral”, agregó.
“La declaración del
IEEBC fue de una constancia de gobernador para 2 años, y lo que hicieron el 8
de julio, publicado el 17 de octubre, está todavía por resolverse en la Suprema
Corte de Justicia de la Nación; por lo tanto, los otros tres años que pretende
Jaime Bonilla sería de un gobierno espurio”, concretó.
“De hecho, por ser
ciudadano estadunidense, con eso ya es suficiente para declararlo un gobernador
espurio”, remató.
Por todo lo anterior,
Jaime Martínez Veloz precisó que el movimiento de la 4R se convierte de manera
paralela en una resistencia y combate a la famosa “Ley Bonilla”, pues la propia
dirigencia nacional del PRD está pronunciándose en contra de una anticonstitucional
ampliación de mandato de la gubernatura de Baja California.
También aclaró que la
4R no trata de conformar un gobierno alterno, sino que, habrán de ser
convocados los diálogos por el Congreso de la Unión y los Congresos estatales,
para integrar las propuestas y opiniones de asociaciones civiles, cuerpos
colegiados, instituciones académicas, sectores productivos, y la sociedad en
general.
De esa manera, indicó,
se asegurarán de que sea efectivamente el pueblo quien marque las directrices
lo que debe ser una auténtica cuarta transformación del país, de fondo y de
forma, “una transformación de gran calado”.
El oficialmente
Comisionado de Asuntos Fronterizos del PRD advirtió que es sospechoso que el
Presidente Andrés Manuel López Obrador no haya hecho uso de sus facultades de
presentar, mediante la Consejería Jurídica de la Presidencia, un recurso de
controversia constitucional contra la “Ley Bonilla”.
Mientras que el
secretario general, o dirigente nacional del PRD, ángel Clemente Ávila Romero,
calificó como pasivo y omiso al Presidente Andrés Manuel López Obrador, luego
coincidió con Jaime Martínez Veloz, en el sentido de darle tiempo al mandatario
nacional, ya que después de publicado el decreto, hay un plazo de 30 días para
impugnarlo.
Todavía tiene tiempo y
oportunidad el Jefe del Ejecutivo Federal para demostrar que está del lado de
la Ley y la Constitución que juró respetar y hacer respetar, presentando esa
impugnación a la “Ley Bonilla”, y que lo haga bien, no de una manera que pueda
ser desechada, concluyeron el dirigente nacional del PRD, ángel Ávila, el dirigente
estatal perredista, Abraham Correa Acevedo, y el Comisionado perredista, Jaime
Martínez Veloz.
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