Octavio
Fabela Ballinas
Libertad,
Tijuana, 28 de septiembre de 2017.- Los ocho prototipos de lo que será el muro
fronterizo entre Estados Unidos y México que se construyen en una zona donde típicamente
las fuerzas armadas hacen ejercicios de paracaidismo en Otay Mesa fue
considerado por la agrupación Ángeles de la Frontera como un acto de
provocación.
Enrique Morones, director ejecutivo de
Ángeles de la Frontera aseguró que lo que pretende la administración del
presidente Donald Trump es que los grupos de activistas respondan con
manifestaciones o calentando los ánimos para desviar la atención hacia este
acto pero dejó en claro que “No vamos a responder con provocación, haciendo
manifestaciones”.
El oficial de prensa de la Oficina de Aduanas
y Protección Fronteriza, CBP, por sus siglas en inglés, Carlos Díaz, el
proyecto es ejecutado por seis compañías que se encargarán de construir los
ocho prototipos. Cuatro serán de concreto y los restantes se harán con otros
materiales, sobre esto Morones simplemente señaló que “es ridículo lo que están
haciendo”.
El proyecto quedará concluido en 30 días y
cada prototipo costará entre 300 mil y 500 mil dólares, dinero que fue
reprogramado de los fondos federales del año fiscal 2017, explicó Díaz.
Posteriormente habrá un proceso de evaluación y prueba que va a tomar de 30 a
60 días.
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