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Operativo conjunto con SEMAR y la CONANP en atención a llamado sobre
la presencia de nido de tortuga prieta sobre ZOFEMAT.
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Durante treinta horas de operativo se protegió el nido a fin de que los
ejemplares continuarán el proceso de incubación, eclosión e iniciaran su
carrera al mar
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El artículo 420 del Código Penal Federal
establece que cualquier tipo de actividades con fines de tráfico, captura,
posesión, transporte y acopio de partes o derivados de tortuga marina, será
penalizado como delito federal
LIBERTAD,
ENSENADA, 07-12-2016.-La Procuraduría Federal
de Protección al Ambiente (PROFEPA), en coordinación con la Secretaría de
Marina (SEMAR), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y
la Policía Municipal, protegieron la eclosión de 120 crías de tortugas marinas
de la especie Tortuga prieta (Chelonia agassizii), las cuales se integraron a
su hábitat natural mediante su carrera al mar en San Felipe, Baja California.
En atención a un
reporte realizado por personal de la SEMAR sobre la existencia de un nido de
tortugas en la Zona Federal Marítima Terrestre (ZOFEMAT), frente del campo
turístico “María Bonita”, por lo que inspectores de la Delegación Federal de la
PROFEPA en la entidad, se dirigieron al lugar señalado para verificar los
hechos.
En el sitio la PROFEPA
observó la presencia de un nido de tortuga que se encontraba una parte
eclosionando, por lo cual el personal de esta Procuraduría supervisó el lugar
alrededor de 30 horas a fin de que los ejemplares continuarán su
proceso de incubación y eclosión correspondiente.
Se vigiló el nacimiento
de los quelonios para salvaguardarlos de los depredadores naturales, así como
de la extracción ilegal de la que pudieran ser objeto, de igual forma
garantizar una mayor taza de eclosión y supervivencia de crías que
posteriormente iniciaron su carrera hacia el mar, las cuales se introdujeron a
su hábitat por sí mismas.
Es importante referir
que las crías al estar bajo la capa superficial de la arena, esperan hasta que
el ambiente exterior esté fresco antes de salir. Generalmente los ejemplares,
que miden alrededor de 5 centímetros de largo, aguardan la noche para abandonar
el nido e iniciar su carrera hacia el mar.
Esta es una etapa muy
peligrosa en la vida de las tortugas marinas, ya que instintivamente, se
dirigen hacia la parte más brillante del horizonte, la que, por lo general, se
encuentra sobre el agua; pero pueden desorientarse si brillan luces tierra
adentro, otro problema es que pueden ser atacadas por depredadores tales como
coyotes, perros, mapaches, cangrejos, aves, entre otros.
Siete de las ocho
especies de tortugas reconocidas a nivel mundial tienen presencia en
Por lo anterior, el
objetivo de las acciones de protección a la tortuga marina y sus nidos,
consiste en salvaguardar y liberar el mayor número de huevos y crías de
quelonios, así como crear conciencia en la población acerca de la importancia
de su conservación.
El artículo 420 del
Código Penal Federal establece que cualquier tipo de actividades con fines de
tráfico, captura, posesión, transporte y acopio de partes o derivados de
tortuga marina, será penalizado como delito federal y se sanciona con uno a nueve
años de prisión o multa de los 300 a los 3 mil días de la Unidad de Medida y
Actualización.
La PROFEPA en
coordinación con la SEMAR y la CONANP realiza a nivel nacional, operativos
permanentes para la protección y conservación de la tortugas marinas, con
objeto de evitar el saqueo, depredación de nidos y modificación del hábitat
durante la temporada de anidación, lo que permite su recuperación poblacional.
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