LIBERTAD,
TECATE, 7-11-2016.-El 25 de
octubre, fue citado en la oficina principal de Inprodeur, el que hasta ese día
sería el asistente de la dirección general Juan Pablo Salazar Peñalosa “Pool”,
había sido contratado el 12 de mayo de este año, la reunión fue para notificarle
de la terminación de relación laboral con la paramunicipal, para ello, a las
10:00 horas se levantó una acta circunstanciada que como motivo sugiere la pérdida
de confianza y la basan en el artículo 57, incisos 3 y 9 dela Ley del Servicio
Civil de los Trabajadores al Servicio del Estado y tal como se estipuló en el
contrato individual de trabajo, el acta la firmó el Director Salvador Castro
Ballesteros y como testigos Rubén Romero López y Claudia Raquel Cota Ruiz,
incluso el suspendido.
El documento le fue
entregado a Salazar Peñalosa y tuvo que salir de las oficinas donde hasta ese
día laboró, sin mayor explicación sobre la determinante situación, inclusive si
se trataba del recorte anunciado días antes por el Alcalde César Moreno, ya que
en el oficio no se describe nada al respecto.
No habían pasado ni dos
días, cuando el locutor de radio Francisco Javier Fimbres Durazo, manejó el
tema en su programa de la mañana, mencionando que un empleado de Inprodeur
había incurrido en el delito de peculado y que la sindicatura a cargo de Daniel
de León Ramos estaba investigando, momentos después el fiscal interno hizo una
llamada a la radio y tocó el tema a pregunta expresa del locutor, diciendo
lacónicamente que sí, había abierto una investigación, ya que se detectaron
irregularidades administrativas, más nada.
El día 1ro. de
noviembre el periódico el Mexicano publicó una nota firmada por José Jiménez
Díaz, Director en Tecate y quien también labora para la estación de Javier
Fimbres, con el siguiente título:“Cesan a funcionario de Inprodeur de Ayuntamiento de Tecate por
peculado”, en el cuerpo de la nota el periodista describe “el funcionario
de nombre Juan Pablo Salazar Peñalosa, segundo a cargo de esa institución por
la presunta comisión del delito de fraude, abuso de confianza, perdida de la
confianza entre otras acusaciones, con este acto la inmobiliaria municipal
reconoce que se operaba un posible peculado de grandes dimensiones en ese
lugar”.
Y continúa: “Los hechos
con los que se relaciona a Salazar son que desde el año de 2015 el Órgano de
Fiscalización Superior del Estado de Baja California (ORFIS), había observado
que este funcionario había comprado tres terrenos en el fraccionamiento popular
“La Ilusión” que es operado por ese Instituto y que no había hecho pago alguno.
Tras solicitarle al
Inprodeur informara cual era la situación actual de los tres terrenos que
estaban en manos de Salazar, la institución respondió presentando recibos en el
que se habían pagados los terrenos, pero en una segunda solicitud de
presentación de los recibos de pago la misma institución entregó recibos de
pagos pero cancelados.
Por lo que la autoridad
dedujo que se imprimían los recibos, los fotocopiaban y luego los cancelaban. Versiones
indican que es
posible que existan dos terrenos más en la misma situación, pero es posible que
esto solo sea la punta de un gran fraude y que ha Salazar se le entregaba el
dinero para hacer los pagos, la autoridad también sospecha que no actuó solo y
que es posible que la acción se realizara con la participación de por lo menos
tres personas”.
Sin embargo, de acuerdo
al acta circunstanciada, ninguno de esos temas se describen, inclusive desde el
25 de octubre que Juan Pablo Salazar Peñalosa dejó de laborar para el
Inprodeur, no ha recibido ningún citatorio por parte de Sindicatura Municipal,
como nadie le ha informado oficialmente que tiene alguna acusación en su
contra, de otra manera ya estuviese denunciado ante la Agencia del Ministerio
Público y bajo proceso judicial, lo que a casi 15 días no se ha dado.
Entrevistado al
respecto, Pool Salazar Peñalosa, señala, que se enteró de ello hasta que
apareció en los medios de comunicación y señala que no tiene ningún delito y
cuenta con las pruebas para rebatir en caso de que lo quieran implicar, pues
aunque reconoce que si tiene dos predios en el fraccionamiento La Ilusión, tiene
atrasos y cuenta con los recibos originales y oficiales que prueban sus pagos
ante el Instituto, por lo que no sería capaz de “quemarse” por una situación
así y está a la disposición de quien lo requiera para cualquier situación en la
que se le acuse.
Por otro lado, declaró
Salazar Peñalosa que por el contrario a las acusaciones de peculado y otras que
se mencionan en la prensa, más bien se trata de una campaña de desprestigio
fraguadas por el locutor Francisco Javier Fimbres y el Síndico Daniel de León Ramos,
quienes utilizaron al director de El Mexicano para sus fines, ordenandole que
publicara la nota, ya que ambos han sido criticados por el “inculpado”, en
distintas ocasiones y por redes sociales, por lo que se trata de una revancha,
pues ya había sido amenazado de que se lo iban a “chingar”.
Pool, también divulgó
en la red social, la nota del semanario Z, en donde se hablaba de la fuga del
yerno de Javier Fimbres, Francisco Palacio Manjarrez, quien hasta hace poco
firmaba como Secretario General, inclusive compartía comentarios fuertes contra
el locutor hechos por su sobrina política Mayté Mendez, de que en la época de
1989-90, fue perseguido por acusaciones cuando Fimbres estuvo a cargo de
Produtsa y tuvo que huir disfrazado de mujer hacia Estados Unidos.
Se espera que en los
siguientes días, se aclare la situación y sobre todo las acusaciones que pesan
en contra de Juan Pablo Salazar, porque es irónico que primero se divulgue en
la radio y en El Mexicano y no haya sido notificado, de otra manera, todo
quedará como un complot organizado por estos personajes para acabar con la
carrera política y de servicio de un joven que proviene de una prestigiada
familia, nieto del destacado maestro, político y funcionario Víctor Manuel
Peñalosa Beltrán.
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