* Señalamientos
vagos entre uno y otros partidos, y entre candidatos
*
Destacan hechos de violencia previos a la elección
* Triunfa
una vez más el abstencionismo
Por José Angel Inzunza
Tijuana,
5 de junio de 2016.-
Como en todas las elecciones populares, hubo retrasos en apertura de casillas y
algunas irregularidades, en muchos casos, irrelevantes para abrir paquetes, y
sobre todo, irrelevantes para cambiar la tendencia del voto emitido.
Los señalamientos que hubo entre partidos, y
entre candidatos, fueron vagos, si no imprecisos, al menos sí carentes de
contundencia para acusar posibles delitos electorales, y en la mayoría de los
casos fueron solamente habladas como chismes de lavaderos.
Destacan sin embargo, presuntos hechos de
violencia previos al día de la elección, en claros intentos de boicotear al
rival de enfrente, obviamente al que ven más peligroso en la competencia.
Lo que nadie duda y es definitivo, que una vez
más triunfa el abstencionismo, lo cual es lamentable, porque por milésima vez
unos cuantos deciden por la mayoría de los electores.
Lo peor de todo es que en el retraso de
apertura de casillas tuvo mucho que ver la apatía ciudadana, hasta para
participar como funcionarios de casilla.
Entre los señalamientos vagos se señala que el dirigente
del PAN en Tijuana, Raúl Felipe Luévano Ruiz dijo que hubo acarreos y la famosa
práctica del “carrusel” desde el centro de operaciones de El Barretal, donde se
asentó el comité distrital 13 del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Asimismo, el líder panista acusó que hubo
participación también de unidades de la
Dirección de Vialidad y Transportes
Municipales, en el acarreo de votos.
Son señalamientos vagos ya que las estructuras,
en todos los partidos, se movilizan teniendo un centro de operaciones, para
buscar y recibir información y distribuir inspectores, representantes de
casillas, entre otros; y en el mejor de los casos, si de acarreos se trata, tan
malos los pintos como los colorados, los azules, y del color que quieran; los
que tienen estructura la mueven, no la mantienen paralizada.
Y en cuanto a la participación de unidades
oficiales, lo hicieron los que tienen el poder, estatal y/o municipal, y
difícilmente para acarrear votantes.
No obstante, se valen las luchas, porque lo
mismo señalaron los de los otros partidos.
Por ejemplo, el día previo a la elección,
estuvo operando un módulo del Seguro Popular en la colonia Obrera; en el módulo
del Diputado priista David Ruvalcaba Flores irrumpieron activistas del PAN para
amedrentar al equipo de colaboradores del legislador local, golpearon a una
mujer, de entre dicho equipo, y se robaron papelería y equipo de cómputo.
En El Barretal precisamente también se acusa
que por la tarde del sábado 4 de junio un comando armado se introdujo para
amenazar, golpear a dos personas, y robarse también papelería y equipo de
cómputo, y al parecer eran Policías Estatales Preventivos disfrazados con
pasamontañas y armados hasta los dientes, con armamento pesado.
Este domingo, en la casilla 806, de la Colonia
Independencia, se detectó a representantes del PAN promoviendo subliminalmente
a su partido con el logotipo de dicho instituto político bien visible en sus
folders de trabajo, el cual lo exhibían ante quienes llegaban a votar a dicha
casilla.
Pecata minuta, pero al fin y al cabo fue una
observación, similares a las que hicieron en su caso los blanquiazules en otras
casillas.
Luego, en la tarde, en la casilla 1939 ocurrió
un conato de enfrentamiento entre representantes panistas y priistas, que por
fortuna no pasó a mayores.
Situaciones como esas, o un poquito más graves,
o menos graves, sucedieron en toda la ciudad de Tijuana, en todo el territorio
bajacaliforniano, y como antes se dijo, sin trascendencia para cambiar la
intención del voto, aunque, por desgracia, sí de un marcado abstencionismo.
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