* Paradas deben edificarse en otras zonas no arboladas
Libertad, Tijuana, B.C., Abril 24 del 2016.- Tijuana tiene un alto rezago de áreas verdes comparado con el resto del
país, y es urgente la siembra de árboles, así lo indicó la directora de
Proyecto Fronterizo y Educación Ambiental, Margarita Díaz, quien lamentó que la
construcción de los paraderos de la Ruta Troncal se están haciendo sobre
camellones donde se han comenzado a retirar y talar árboles y palmeras.
El proyecto del Sistema Integral de Transporte de Tijuana (SITT)
incluye al menos 38 estaciones, donde a la fecha han avanzado en su
edificación, sin embargo ha sido notable que para ejecutar dichas acciones, han
comenzado a remover y talar árboles, así como palmeras que se ubican en los
camellones.
"Hay una situación preocupante porque no tenemos ni el mínimo que
establecen las organizaciones internacionales de áreas verdes por habitantes,
por ello sí tenemos un rezago muy importante", planteó la activista.
En Tijuana, las construcciones del proyecto de transporte se realizan sobre
camellones, un ejemplo claro y notorio ha sido sobre avenida Centenario, frente
a las oficinas del
Gobierno local. Donde
antes predominada el área verde, ahora es evidente que ha habido árboles
retirados y troncos cortados.
"Hay árboles que tienen hasta cuarenta años que duraron en crecer, y
si los cortan, la recuperación no es tan rápida, la naturaleza tienen su ritmo
y su tiempo, y no es por decreto que crecen los árboles", expuso.
Para la activista, la autoridad local debió iniciar los trabajos de
construcción en zonas que ya fueron impactadas y sobre esas construir para no
afectar donde a la fecha hay árboles o pasto.
"Se deben utilizar las áreas que en su momento ya fueron impactadas,
pero si en su momento (de frenarlo) porque la traza urbana y la ciudad ha
crecido y por ese lugar debe pasar el transporte, entonces se debe compensar y
la ciudad debe comprar otros terrenos para entonces
compensarlo", sostuvo Margarita Díaz.
Comentó que en el municipio existe una amplia necesidad de áreas verdes no
solo por imagen para una ciudad, sino porque realmente se necesitan
espacios donde los ciudadanos tengan contacto con la naturaleza, y que además
tendría un impacto positivo en el espacio ambiental al generar oxígeno y servir
de barrera a la contaminación de ruido.
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