Libertad, Tijuana., Enero 20 del 2016.- Uno de los actores que no ha sido
tomado en cuenta en el proyecto del Bus Rapid Transit (BRT) es el usuario,
aquel que se va a subir al transporte. Es muy ambicioso el proyecto, pero
debemos asegurarnos de que haya continuidad, manifestó Carmelo Zavala,
presidente del Consejo Consultivo de Desarrollo Sustentable.
Indicó que el usuario
no está organizado, y que el Gobierno municipal es un actor, aunque más bien
debe ser un actor en la continuidad, y que el consejo ciudadano no se
compone de usuarios. Dijo que otra variable es la contabilidad del impacto
ambiental.
"Es más
destacado que la verificación vehicular si se mueven a gas natural, como lo
mencionó el alcalde, y esta primera etapa puede sacar a mil camiones y
hacerlos de gas natural, una estación de gas natural comprimido para esta flotilla
va a dar la posibilidad para tener abasto para privados en los que puedan
moverse al gas natural comprimido, que es 40% más barato, con los cálculos que
hicieron, y emite 70% menos emisiones a la atmosfera".
Explicó que un carro
puede costar unos mil 200 dólares transformarlo a gas natural; en ese sentido,
dijo que en un automóvil normal quizá se pueda tardar un año y medio
en compensar, pero en un taxi, de seis a ocho meses en recuperar la inversión.
Apuntó que el
municipio puede conseguir bonos de carbono. Además, dijo que no se alcanza a
ver la integración de la movilidad peatonal, de bicicletas, que haya más
calidad de vida, que sea más amigable y haya un sentido de integralidad.
"Tampoco se ve
el uso de suelo, que se permitan comercio y vivienda. Dicen que hay un blindaje
pero realmente es posible que los transportistas saquen de circulación un
determinado número de unidades por la Ruta Troncal, esos obstáculos son muy
serios, y descarcachizar es importante".
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