Paga Predial fácil, y sin multas ni recargos

Paga Predial fácil, y sin multas ni recargos
XXIII Ayuntamiento de Tijuana

Memorias de un ángel caído


La Formación del Planeta Tierra

Parte 5

Por Azrael

Libertad, febrero 2015, Tijuana, B. C.- En el capítulo anterior concluimos hasta el Día Tercero de la Creación, y ahora comenzaremos a analizar la parte más emocionante, que fue la creación de la inmensa variedad de formas de vida de la que ahora gozan ustedes, los seres humanos, en su planeta Tierra.
Génesis
Capítulo 1
Versículo 14
Y Dios pasó a decir: “Llegue a haber lumbreras en la expansión de los cielos para hacer una división entre el día y la noche; y tienen que servir de señales y para estaciones y para días y años”.
Como se podrá notar, no fueron creadas esas “lumbreras”, o sea el sol, la luna y las estrellas, en el Cuarto Día, sino que ya existían antes de ser formada la Tierra. A diferencia de lo que ocurrió en el Día Primero, en que “se hizo la luz”, ahora lo que dice el versículo 14 es que las fuentes de esa luz sean ya visibles en los cielos, lo cual fue posible porque entonces terminó Dios de separar bien las aguas de arriba y las aguas de abajo, buena parte de ella las usó para formar las capas de la atmósfera, con los diversos elementos disponibles después del enfriamiento del planeta.
Asimismo, noten que Dios estaba estableciendo que esas luces celestiales sirvieran no solamente para hacer una división ahora sí bastante clara, de los días y noches; también sirven para señales de orientación y para medir las cuatro estaciones del año, así como para medir el tiempo en días, semanas, meses y años; por lo tanto, es una ciencia que aprendieron ustedes los humanos y han llegado a perfeccionarla para el aprovechamiento de ustedes, lo cual como dice Dios “es bueno”.
Vea por ejemplo, que además esos astros influyen en las estaciones y como dice Génesis 8:22: “Durante todos los días que continúe la tierra, nunca cesarán siembra y cosecha, y frío y calor, y verano e invierno, y día y noche”.
Sin embargo, se aclara en Deuteronomio 4:19 que esos astros no deben ser objetos de adoración, está
esa idolatría entre las cosas que Dios prohibió a su pueblo escogido.
En 1 Crónicas 23:31 pueden notar que los hebreos ofrecían sacrificios quemados en los sábados, lunas nuevas y en períodos festivos. De nueva cuenta, una de las utilidades de la observancia de los astros.
Y es significativo notar cómo en Salmos 104:19 dice: “El ha hecho la luna para tiempos señalados; el sol mismo conoce bien dónde se pone”, lo cual demuestra que Dios creó los astros con propósitos bien definidos, algunos de los cuales han descubierto sus científicos.
Génesis
Capítulo 1
Versículo 15
“Y tienen que servir de lumbreras en la expansión de los cielos para brillar sobre la tierra”. Y llegó a ser así.
En Jeremías 33:25 el profeta dice esto: “Esto es lo que ha dicho Jehová: “Si no fuera un hecho que yo he designado mi propio pacto del día y la noche, los estatutos de cielo y tierra…”, lo cual confirma pues, que Dios creó los astros con propósitos positivos para ustedes los humanos, y en Ezequiel 32:8 Dios advierte que tiene poder para manipular esos astros, si así lo quisiera.
Génesis
Capítulo 1
Versículo 16
“Y Dios procedió a hacer las dos grandes lumbreras, la lumbrera mayor para dominar el día y la lumbrera menor para dominar la noche, y también las estrellas”.
Si bien es cierto que aquí aparentemente el escritor da a entender que apenas estaban creándose los astros, o sea, el sol, la luna y las estrellas, también recuerden que el lenguaje usado es el de un observador desde dentro del planeta tierra, que al ver descorrerse las nubes por fin vio la fuente de la luz del día, y para él era como si apenas se hubiera formado el sol, la lumbrera mayor para dominar el día, y cuando por fin cayó la noche, de muchas noches del Día Cuarto de creación, para el observador interno era como si apenas se hubiere formado la luna, la lumbrera menor para dominar la noche, “y también las estrellas”.
Esto lo pueden entender mejor si se ponen en el plano de observación interior, como están precisamente ustedes en este planeta, e imagínense que no supieran nada de lo que ahora saben, por lo que, si les pasaran imágenes de la creación, tal y como lo hemos estado describiendo, es obvio que, si en los primeros tres Días Creativos no hubiesen visto las fuentes de la luz tenue que vieron en ese tiempo, al darse los fenómenos de expansión y se despejaran las nubes, para ustedes también parecería que apenas se estaban haciendo o simple y sencillamente expresarían esto que dijo el Salmista en Salmos 8:3:
“Cuando veo tus cielos, las obras de tus dedos, la luna y las estrellas que tú has preparado”, obviamente es un acto admirable de la creación, que todavía causa mucho impacto y sin duda, añaden el reconocimiento que se hace también en Salmos 136:7-9: “a Aquél que hizo las grandes luces: porque su bondad amorosa es hasta tiempo indefinido; aún el sol para dominio del día: porque su bondad amorosa es hasta tiempo indefinido; la luna y las estrellas para dominio aunado de noche: porque su bondad amorosa es hasta tiempo indefinido”.
Y noten el poder de Dios sobre los astros y toda su creación, como lo indica Jeremías 31:35: “Esto es lo que ha dicho Jehová, el Dador del sol para luz de día, los estatutos de la luna y las estrellas para luz de noche, Aquél que agita el mar para que se pongan bulliciosas sus olas, Aquél cuyo nombre es Jehová de los ejércitos:”
Por lo tanto, Génesis 1:16 no habla de la creación de los astros, sino de su visualización primera de parte del observador interno, maravillado por todo lo que estaba siendo creado.
Así concluimos hasta aquí lo que dice:
Génesis
Capítulo 1
Versículo 17
“Así las puso Dios en la expansión de los cielos para brillar sobre la tierra,”
Versículo 18
“ y para dominar de día y de noche y para hacer una división entre la luz y la oscuridad. Entonces vio Dios que era bueno”.
Versículo 19
“Y llegó a haber tarde y llegó a haber mañana, un Día Cuarto”.

Huelga decir que la “entrada” de lleno de los astros en los cielos terrestres permitió lo que en el siguiente capítulo observarán, de la creación de los animales y, el ser humano, con una gran variedad de especies.

Comentarios