Libertad, Tijuana, B.C.- El
sábado pasado, se dió el curso en materia preventiva para saber como actuar de
manera oportuna y eficaz en casos de emergencias. indicó el coordinador de la
Unidad Interna de Protección Civil de DIF
Tijuana, Marco Antonio Sánchez Navarro
El curso consistio ene proporcionar las herramientas
básicas que permitan fortalecer los conocimientos y destrezas para planear,
habilitar y operar satisfactoriamente refugios temporales abiertos y cerrados
en casos de emergencia y/o desastre.
Este curso fue
realizado para cumplir con el reglamento de Protección Civil de la ciudad, el
cual establece la capacitación a través de DIF Tijuana, de los responsables de
cada una de las delegaciones, en establecer y
operar refugios temporales ante cualquier catástrofe.
El objetivo
del taller teórico-práctico es preparar a las personas con conocimientos en materia de prevención para atender de
manera oportuna y eficaz en casos de siniestro o desastre, y ante la próxima
temporada de lluvias, indicó el coordinador de la Unidad Interna de Protección
Civil de DIF Tijuana, Marco Antonio Sánchez Navarro.
Ricardo Luján Páez,
consultor en Protección Civil e instructor independiente en seguridad
industrial y respuesta a emergencias, fue el encargado de impartir el curso
intensivo de 8 horas teóricas y 6 prácticas, el cual constó de 6 módulos
impartido a 30 empleados de las delegaciones La Mesa, Zona Centro, Sánchez
Taboada, San Antonio de los Buenos, Otay-Centenario y Playas de Tijuana.
En la capacitación
los colaboradores municipales aprendieron los diferentes fenómenos
perturbadores existentes; los reglamentos y normatividad en base a los que
activan los refugios; la clasificación y requerimientos de los mismos; su
planificación y preparación; su organización y la activación y operación de los
mismos. Todo con el propósito de dar una respuesta eficaz y satisfactoria a las
familias que se vean en alguna emergencia, resaltó Luján Páez.
En base a los
conocimientos de relieve en cada delegación, los asistentes además planearon
cuatro lugares
para habilitar refugios abiertos, y cerrados dependiendo de las
necesidades derivadas del tipo de agente perturbador que se pudiera presentar.
Para la parte
práctica del taller, los asistentes trabajaron en un edificio del Cortijo San
José de Playas de Tijuana, en la atención de poco más de 60 voluntarios que
simularon distintas problemáticas.
Este módulo
refuerza los conocimientos adquiridos en la primera etapa del curso y permite a
los empleados municipales enfrentar de cara una situación lo más cercana
posible a casos verdaderos de desastre, indicó el consultor Ricardo Luján.
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