El Licenciado Eduardo de la Peña Sánchez (a la derecha, el que no tiene sombrero), es un serio aspirante a titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) que será oficial en breve. |
* Ofrece reivindicar el
papel de ombudsman, que en Baja California ha sido muy politizado o ejercido
con tibieza
Por José Angel Inzunza
LIBERTAD, TIJUANA.- Toda vez que en el Congreso del
Estado ya se manejan reformas a las leyes relativas con los derechos humanos, y
tiende a desaparecer la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) de Baja
California, para formarse la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), el
primero que ha manifestado interés en ser el próximo titular de dicha
institución es el licenciado Eduardo de la Peña Sánchez.
Actualmente
se concentra en las actividades de promociones turísticas, pero toda su vida la
ha dedicado a la defensa de los derechos humanos desde diversas trincheras, por
ejemplo, con una representación en la Organización de las Naciones Unidas
(ONU), y como está vigente en esa actividad, ofrece reivindicar el papel de
ombudsman, que en Baja California ha sido muy politizado o ejercido con tibieza.
El
pasado 2 de julio, La Comisión de Gobernación, Legislación y Puntos
Constitucionales, que preside el Diputado Roberto Dávalos Flores, aprobó la
ruta que contempla las reformas en materia de derechos humanos, las cuales
consisten en desaparecer la PDH y convertirla en CEDH, con la obvia remoción
del actual Procurador, Arnulfo de León Lavenant.
De
lo anterior se derivará el lanzamiento de una convocatoria, para seleccionar de
entre los aspirantes al que por decisión del Congreso cumpla con el perfil
idóneo para el cargo de Presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
En
otras partes del país así es como funciona esa institución, lo cual presupone
también una ampliación de facultades, para imponer medidas de apremio en las
recomendaciones a los funcionarios y gobernantes.
Eduardo
de la Peña se congratuló de que los diputados locales estén dirigiendo las
reformas legales en esos sentidos, porque en Baja California ya necesitamos
transitar por esos caminos, para una mejor defensa de los derechos humanos.
Por
desgracia, la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) de Baja California ha
sido, en cierta forma, “secuestrada” por partidos políticos, o peor aún, ha
sido ocupada por titulares que hacen un trabajo muy “tibio”, un trabajo “gris”,
casi tirándole a negro, porque no solamente han sido parcos en su actuar, sino
que además, se han corrompido o, su actuar ha sido más perjudicial que benéfico
para la sociedad.
Seguramente
por esas razones el licenciado De la Peña Sánchez hace incapié en dignificar el
papel del ombudsman, y con marcado interés se pronunció por un sí a las
víctimas y un rotundo no contra los delincuentes.
Arnulfo de León Lavenant ya siente pasos en la azotea, porque lo destituirán al desaparecer la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) en Baja California. |
Lamenta
pues, que esas instituciones u organismos que se supone son defensores de los
derechos humanos, han sido catalogados como presuntos defensores de delincuentes,
y especialmente ofensores de las víctimas de delitos, de manera voluntaria o
involuntaria.
Como
dijera Desmond Tutu, Premio Nóbel de la Paz en 1984: “Si eres neutral en situaciones de injusticia, has
elegido el lado del opresor”. Y de la misma manera, por enfocarse mucho los
organismos de derechos humanos a defender los derechos de los detenidos, muy a
menudo, o la mayoría de las veces, se ponen del lado de los delincuentes, y no
de las víctimas.
En
ese contexto, Eduardo de la Peña lamenta que la PDH recibe un presupuesto
público muy elevado y no se ven acciones contundentes, por no decir que no se
ven acciones de beneficio para la gente.
Asimismo,
considera absolutamente necesario que se le de mayor facultad al ombudsman,
para que se exijan medidas de apremio u obliguen a los funcionarios y
gobernantes, que acaten las recomendaciones, o que por lo menos, fundamenten
sus negativas.
Por
desgracia sí se han registrado muchísimas negativas a las recomendaciones que
expide la PDH, con argumentos fútiles, o sea, no contundentes, o lo que es
peor, nomás porque se les hinchan los productos de gallina a los funcionarios.
Todo
eso es parte de lo que tiene que cambiar, enfatiza De la Peña Sánchez, que
propone acciones enérgicas contra el bullying en las escuelas, contra la
violencia interfamiliar, especialmente contra la agresión verbal y física
contra los niños, y promover fuerte los derechos de la infancia.
También
se propone defender y atender a los jornaleros de San Quintín, y promover
acciones contra la venta de droga que inunda esa comunidad, y contra la
deserción escolar, así como promover más la cultura y el deporte, por ejemplo,
que en el Auditorio Municipal se baje la renta para que hagan más accesible el
deporte a las familias, y que los niños y jóvenes hagan más deporte y no los
absorban los videojuegos.
Comentarios
Publicar un comentario