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XXIII Ayuntamiento de Tijuana

Javier Salas no es el favorito de los transportistas

* Ni hizo nada contra Altisa, ni resolvió las problemáticas principales del sector de transporte público, aunque se haya colgado medallas por el retiro de los taxis amarillos
José Ángel Inzunza Mendoza
Tijuana, 10 de septiembre de 2019.- El pasado 20 de julio, en un conocido portal de noticias, AFN, se publicó que, en los corrillos políticos cercanos al alcalde electo, Arturo González Cruz, se mencionaba a Javier Salas Espinoza como posible director de Vialidad y Transportes Municipales –otra vez-, en el XXIII Ayuntamiento de esta localidad.
Sin embargo, se debe recordar que el 5 de abril de 2017, cuando Salas Espinoza estaba en funciones en ese cargo, fue denunciado por la empresa transportista El Tijuanense, por estar coludido con Altisa, para la invasión de rutas.
Si se hace un sondeo entre todos los transportistas, la mayoría, si no es que todos, los que tienen permisos y concesiones acreditadas, no estarían de acuerdo con ese nombramiento por parte del nuevo alcalde que entrará en funciones el próximo día primero de octubre.
Los motivos del rechazo son muchos; Javier Guadalupe Salas Espinoza habrá sido Fiscal especial en el área de Homicidios, de la PGJE, pero en lo que se refiere a ordenar y regular el transporte público fue un fracaso.
Los transportistas señalan que Javier Salas no hizo nada contra Altisa (peor todavía si, como dicen, se coludió con esa empresa), y no resolvió las problemáticas principales del sector: invasiones de rutas, taxis “clonados”, circulación de unidades sin permisos, sin seguro, sin revisiones mecánicas, y otras irregularidades que persisten.
Se le cuelga a ese personaje, actualmente representante del Ayuntamiento de Tijuana en el Sistema Integral del Transporte de Tijuana (SITT), las medallas por el retiro de los taxis amarillos de la Línea Internacional, sin embargo, ese fue un logro del Departamento Jurídico del XXII Ayuntamiento, contra una magistrada del Tribunal de lo Contencioso Administrativo.
Y el retiro de los sitios que tenía acaparado el gremio de los taxis amarillos fue una orden del alcalde Juan Manuel Gastelum Buenrostro, que mal habría hecho Javier Salas si hubiera desobedecido dicha orden.
Aun así, ese “heroico” “logro” de Salas Espinoza no cambia para nada que, como antes se indicó, no se resolvieron ni en lo mínimo las problemáticas principales del sector del transporte público.
No resolvió tampoco (y no se ha resuelto) el caso del joven Brandon Morelos, quien quedó parapléjico por causa de un accidente provocado por una unidad de la empresa Altisa, la cual carecía de “seguro contra accidentes”, pues Altisa acostumbra operar unidades sin permisos, y sin seguro.
Por lo anterior, si se hace un sondeo, y se va a realizar, existe altas probabilidades de rechazo a la “candidatura” de Javier Salas para ser de nuevo director de Vialidad y Transportes Municipales.

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