Diputados avalan cambios a la Constitución para que el español y lenguas indígenas sean idiomas nacionales

Libertad, Ciudad de México, Abril 26 del 2018.-El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó, con mayoría calificada de 326 votos a favor, sin votos en contra ni abstenciones, reformas a la Constitución a efecto de reconocer el idioma español y las lenguas indígenas como nacionales, las cuales forman parte del patrimonio cultural intangible de la nación.

El dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales, por el que se adiciona un párrafo tercero al artículo 2° de la Carta Magna, plantea que las leyes establecerán la promoción, estudio y preservación de las lenguas e idiomas nacionales.

Con ello, refiere, todas las formas de expresión lingüística son válidas para establecer procedimientos civiles, legales o administrativos, pues su reconocimiento es garantía de respeto a las formas, usos y costumbres, así como a valores culturales señalados en la Carta Magna.

La propuesta recoge diversas iniciativas, en las que se menciona un informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el que señala que 13 por ciento de la población indígena nacional sólo puede expresarse en su lengua materna (no español), situación que se ve acrecentada en el caso de las mujeres, al registrar que 32.2 por ciento de las hablantes de lengua Indígena no puede incorporarse al mundo laboral formal por carecer de habilidades lingüísticas en español, lo que las supedita a trabajar por cuenta propia.

Se indica que 45.3 por ciento de la población que habla lengua indígena, tiene menos de 30 años; los que tienen entre 3 y 14 años, representan 20.4 por ciento, y los jóvenes de 15 a 29 años, 24.9 por ciento.

A pesar de la importancia de la lengua como condición de identificación y sentido de pertenencia, y de su aporte a la cultura nacional y su relevancia como antecedente histórico, la Constitución no ha establecido el idioma oficial del país ni ha contemplado su coexistencia con otras lenguas originarias, lo que vulnera el derecho de todos los indígenas a conservar su propia identidad.

De ahí la pertinencia de que el Estado reconozca todas las formas de expresión lingüística como nacionales, sin pensar sólo en una de ellas como lengua oficial pues “vulneraría a las otras”.  Una vez aprobado el dictamen, se envió al Senado para los efectos Constitucionales.