*
Una lata de refresco contiene 40 gramos de azúcar libre o lo que equivale a 10
cucharas de té
LIBERTAD, MÉXICO, 18-10-2016.-La Organización Mundial
de la Salud (OMS) pidió a los gobiernos que
establezcan nuevos impuestos para las bebidas azucaradas, a las que
responsabilizó del aumento de la diabetes, las caries y la obesidad, una
patología con dimensiones epidémicas en algunos países.
Según un estudio presentado
con ocasión del Día Mundial contra la Obesidad, aplicar políticas fiscales que
generen un aumento del 20% en el precio final de las bebidas azucaradas
supondría una reducción equivalente en el consumo de estos productos.
Los datos aportados por la organización son alarmantes e indican que una de cada tres personas tiene sobrepeso y que 42 millones de niños menores de cinco años entran en esta categoría (11 millones más que en el año 2000).
Los datos aportados por la organización son alarmantes e indican que una de cada tres personas tiene sobrepeso y que 42 millones de niños menores de cinco años entran en esta categoría (11 millones más que en el año 2000).
El 11% de los hombres y
el 15% de las mujeres de la población mundial son considerados obesos.
Paralelamente, la diabetes de tipo 2 se ha multiplicado por cuatro en los últimos 30 años, con 400 millones de adultos con esta enfermedad.
Paralelamente, la diabetes de tipo 2 se ha multiplicado por cuatro en los últimos 30 años, con 400 millones de adultos con esta enfermedad.
Frenar
esta tendencia pasa por reducir el consumo de alimentos con azúcar
añadida, pero sobre todo de bebidas azucaradas, en las que el contenido de
dulce es mayor y que son más populares entre los niños y jóvenes, señaló la
OMS.
Una lata de refresco
contiene 40 gramos de azúcar libre (monosacáridos, como fructuosa o glucosa) o
lo que equivale a 10 cucharas de té.
Esto significa que con
una sola de estas bebidas un adulto ya consume el máximo recomendado de la
ingesta diaria de azúcar y el doble de los 20 gramos diarios que la OMS
considera realmente saludable.
"Las bebidas
azucaradas son muy fáciles de consumir y se han convertido en un producto muy
accesible", explicó el doctor Francesco Branca, jefe del Departamento de
Nutrición y Salud en la OMS.
Pese a la gran cantidad
de información disponible sobre los efectos perniciosos del consumo excesivo de
azúcar, "su consumo no se está reduciendo y en algunas partes del mundo
incluso está aumentando", agregó.
El experto reveló que
el mayor consumo de ese tipo de bebidas ha pasado de Estados Unidos a
Latinoamérica, con Chile y México como los mayores consumidores del mundo, este
último prácticamente al mismo nivel que EU.
"Mientras en
Estados Unidos vemos cierta reducción en la ingesta de calorías, en los últimos
cinco años observamos el movimiento inverso en Latinoamérica", comentó el
especialista.
A las dietas insanas se atribuyen once millones de muertes al año en el mundo y más de cuatro millones por obesidad.
A las dietas insanas se atribuyen once millones de muertes al año en el mundo y más de cuatro millones por obesidad.
"Sabemos que
aplicar impuestos a las bebidas azucaradas es una medida muy efectiva para
reducir su consumo, lo que contribuye a la reducción de la obesidad y a
prevenir la diabetes", declaró por su parte el doctor Temo Waqanivalu,
principal responsable del estudio.
Aunque el contenido de azúcar es mayor en los refrescos o bebidas gaseosas, el experto señaló que las medidas fiscales deben aplicarse de manera proporcional a todas las bebidas con contenido de azúcar, incluyendo los zumos de frutas, bebidas energéticas, bebidas para desayunos y a la leche con sabores.
Aunque el contenido de azúcar es mayor en los refrescos o bebidas gaseosas, el experto señaló que las medidas fiscales deben aplicarse de manera proporcional a todas las bebidas con contenido de azúcar, incluyendo los zumos de frutas, bebidas energéticas, bebidas para desayunos y a la leche con sabores.
Waqanivalu puso a
México como ejemplo de un país donde el Gobierno ha tomado medidas para frenar
el aumento acelerado de consumo de bebidas azucaradas.
Ello mediante el establecimiento, en enero de 2014, de una tasa especial que causó un incremento del 10 % en el precio final del producto.
Ello mediante el establecimiento, en enero de 2014, de una tasa especial que causó un incremento del 10 % en el precio final del producto.
El impacto ya podía
medirse a finales de ese mismo año, con una reducción del 6% del consumo
general y de hasta un 17 % en los sectores de menores recursos, detalló
Waqanivalu. (Agencia EFE)
Comentarios
Publicar un comentario